domingo, 4 de noviembre de 2012

Bonita pareja


Daniel Montes de Oca



“Hacen bonita pareja”, nos dijo mientras intentaba vendernos un tiempo compartido en un hotel de cinco estrellas de Huatulco.
La aseveración de la regordeta mujer nos hizo mirarnos y apenas soltar una sonrisa fingida. Estábamos llegando al ‘paraíso’ con una boda como el pretexto perfecto para olvidarnos del mundo y de nuestras vidas en la redacción de un periódico.
Sostenemos una sui géneris amistad que no cultivamos con frecuencia, pero se mantiene intacta por un amor que no se merma con la distancia.
“Ella haría bonita pareja casi con cualquiera”, reflexioné, al tiempo en que valoraba la integridad de mi acompañante, a la que incluso llamaron “señora”, asumiendo un matrimonio entre nosotros.
Nuestra parada fue en la Bahía de Tangolunda, una de las nueve maravillas del estado de Oaxaca. Ambos éramos ‘primerizos’ en el lugar.
Aunque son casi seis años de conocernos, este viaje fue un descubrimiento recíproco y permanente. Conocí de primera mano su excelsa filantropía; admiré la fortaleza que le heredó su madre (q.e.p.d); me cautivó la lealtad que es capaz de ofrecer; me enamoré de cada sonrisa; suspiré con ella bajo el cobijo de la luna; la sufrí envuelta en cólera; reconocí la felicidad a su lado y en completa paz…
Ella pudo convivir con la versión poco conocida de un tipo reacio e inexpresivo. Odió mis ronquidos; valoró mi peculiar humor; reafirmó que soy tan sentido como raro; y disfrutó con la alegría con la que un niño vuela un papalote cada una de mis ocurrencias, como manejar ‘a ciegas’ y a toda velocidad la moto acuática.
La llave que nos condujo a un viaje inolvidable fue el atrevimiento. Desde nuestros atuendos en la boda, opuestos a ‘lo recomendado’ y a los que usaron la mayoría de los invitados, hasta dejarnos ‘encantar’ por un lanchero de nombre Zeferino que nos trazó un paseo perfecto, compartió su historia con nosotros y nos sugirió visitar su página de ‘Feibu’…
Fueron cuatro días sin desperdicio. Reímos, bailamos, peleamos, cantamos, pescamos, paseamos, vivimos, bebimos, platicamos, nadamos, descubrimos, snorkeamos, leímos, reflexionamos, vislumbramos, planeamos, soñamos…
“Mira lo que me pasó”, me dijo con voz de niña mimada una mañana cuando el lavabo acumuló el agua y no fue capaz de destaparlo.
Cada detalle lo convertimos en fiesta. No paramos de reír al recordar la anécdota. Éramos dos amigos viviendo un ‘romance’ de amigos.
En otra ocasión, Ana se quemó la piel por exponerse de más al sol, e incluso la búsqueda de algún remedio representó una excelente oportunidad de solidaridad, de complicidad.
“Te sacaste un 10 con estas vacaciones”, me comentó en las últimas horas de nuestra aventura, y fue todo tan imperfecto, que sólo pude coincidir con su apreciación.
Días después, ya de vuelta en nuestras respectivas realidades en la ‘Ciudad de la esperanza’, el novio de la boda a la que asistimos me dijo lo mismo que la mujer que nos recibió en el Hotel Dreams Resorts de Huatulco: “Hacen bonita pareja”…
Esta vez, ya sin ella a mi lado, sólo pude asentir.
DRMO
Para ti, ‘AnaLui’

lunes, 15 de octubre de 2012

Las personas


Daniel Montes de Oca

“Las personas se enamoran de las personas”… Así de simple; así de complejo. Con esta frase, alguien, alguna vez, enterró las preferencias sexuales y le dio eternidad al amor.
Decía Shakespeare que “la vida es un gran escenario en el cual hombres y mujeres son los personajes principales”; pues bien, en esta ‘obra de teatro’ en la que impera la búsqueda de una pareja como pretexto perfecto para acceder a la felicidad, nadie está exento de vivir el drama y la comedia; la algarabía y el desazón; la música y sus silencios.
Somos una tribu hambrienta de compañía, estamos en caza permanente y devoramos cualquier esperanza que nos susurre al oído un futuro lleno de luz.
Muchas veces acertamos en la elección y nos eligen; bendita coincidencia. Otras, erramos y no somos correspondidos; ley de vida.
La plenitud asoma y coquetea, pero no cede ante tímidos esfuerzos. La oportunidad toca a la puerta y pasea por los pasillos, aunque tiene poca paciencia con los que se atreven a ignorarla.
La tristeza es un estado transitorio y necesario que puede volverse perenne si lo adoptamos como el argumento que explique nuestra ‘mala suerte’.
Decía Dostoievski que “un momento de dicha es bastante para una vida entera”. Lo cierto es que nada nos basta, somos seres imperfectos que tenemos el firmamento como techo.
Lo cierto es que muchos no contamos en nuestros recuerdos ese instante que nos lleve a balbucear entre bostezos de nostalgia un “valió la pena”…
Estar a la espera de un golpe de suerte para encontrarle sentido a nuestro andar es como agonizar cada día con la esperanza lejana de nunca morir.
En ‘mi historia’ se encuentran anhelos frustrados, ilusiones intactas, pasajes inmortales, leyendas escritas, cuentos inconclusos, sueños sin insomnio, finales felices, principios inesperados, citas sin pactar, miedos en primera fila y un sinfín de etcéteras.
También he pensado en rendirme, también me ha abrazado el pesimismo, también me he sentido desamparado, también he llorado; también he creído que ‘las batallas contra las mujeres son las únicas que a veces se ganan huyendo’; pero también sigo en pie, listo para conquistar al porvenir.
Hoy tengo claro que NO quiero a mi lado a una mujer que ‘pare el tráfico’, sino a una que en medio de éste me acompañe y juntos poder disfrutar del caos…
“Las personas se enamoran de las personas”… Hoy, me voy a enamorar…
DRMO
Octubre de 2012

sábado, 7 de enero de 2012

Necesito

Daniel Montes de Oca

Necesito una discusión en la mañana provocada por mi eterna pereza para abandonar la cama…
Necesito el relato de una historia cotidiana tan ajena a la mía, que me sorprenda por su simpleza…
Necesito compartir los tiempos libres que no tengo, porque la vida cada día me cuesta más en silencio…
Necesito que me digas lo mal que lo hago cuando el malhumor se impone sobre la filantropía…
Necesito a las musas que te circundan para escribir más, hacerlo mejor y plasmarte a ti en cada idea…
Necesito un abrazo que me encante y me conserve risueño pese a la cotidianidad y a la rutina…
Necesito ofrecerte a un ser humano que vive en una concha protegido de sus miedos, pero ansioso por salir para vencerlos…
Necesito gritar sin que me importe quién me escuche, mientras mis palabras encuentren un oído receptivo…
Necesito aventurarme más, planear menos y no pensar nada; simplemente actuar, fiel a mi esencia que no guarda maldad…
Necesito convivir con extraños sin juzgarlos, lejos de toda expectativa que no sea conocer, aprender y compartir…
Necesito despertar sin la sensación de que lo que ocurrirá en el día ya lo viví una y otra vez…
Necesito que dentro de tu extraordinaria independencia me necesites un poco y sientas que tú me provocas lo mismo…
Necesito mirar al tiempo a la cara sin temores ni remordimientos por haberlo dejado pasar y no haber plasmado una historia que valga la pena…
Necesito ir al cine y no entenderle a una película, pero salir maravillado por un momento irrepetible a tu lado…
Necesito que me reproches que el futbol ocupa mis espacios para desmentirte con un beso que me haga perderme un gol histórico…
Necesito dejar de sobrevivir para acceder más seguido a ese estado utópico que se llama felicidad…
Necesito darlo todo por alguien, reencontrar la fe que perdí por un gran golpe y saberme capaz de cualquier cosa…
Necesito acortar estas noches de insomnio con tu imagen en el techo; te necesito en mi vida…

DRMO

Imposible


Daniel Montes de Oca



 Imposible luchar contra el deseo, lo que quiere lo cobra al precio del alma…
Imposible volverte a ver y reeditar las sonrisas, ésas se fueron arrolladas por el llanto…
Imposible no soñar con una revancha, aunque ésta tenga a un equipo distinto en el campo de batalla…
Imposible matar a la nostalgia, que es el alimento que me mantiene de pie, listo para no volverte a ver…
Imposible apagar el brillo de tu imagen que me deslumbra y recuerda por dónde debo caminar…
Imposible creer que el tiempo seguirá su recorrido sin dedicarme una mirada…
Imposible ganarle la carrera a la tristeza sino me preparo con altas dosis de felicidad…
Imposible seguirte esperando cansado de confiar en un golpe de suerte…
Imposible renunciar a mi esencia que me da y arrebata, pero me conserva limpio para no desviar la mirada…
Imposible que las ideas de los demás se conviertan en mi cosecha y ocupen el vacío de mi hortaliza…
Imposible darle la espalda a un presente que me demanda invadir todos sus rincones…
Imposible dejarle al destino las decisiones importantes, ésas se toman luego de una borrachera entre el sentimiento y la razón…
Imposible saber cuáles son las palabras adecuadas sino dejamos que el alma se exprese primero…
Imposible condenar al amor sólo porque anda de viaje, cansado de nuestros rechazos…
Imposible no abrirle los brazos a lo desconocido, pues en su equipaje podría esconderse la fortuna…
Imposible no creer en lo imposible… Y ante la duda, tocar en la puerta de los hechos…
DRMO
17 de Mayo de 2011

Historia de Sanborns

Daniel Montes de Oca


“¿Tiene la pastilla del día siguiente?”, preguntó con el desenfado con el que se pide una caja de aspirinas. En menos de cinco segundos, las miradas de siete u ocho comensales estaban puestas en su esbelta y pequeña figura. Apenas sonrió al sentirse rodeada, y tras la respuesta afirmativa de la dependiente del lugar, encargó la píldora, por la que pagó casi 200 pesos.
Se condujo con dominio de la situación, dejando entrever que no era la primera vez que realizaba dicha operación, pues al revisar la caja le hizo un par de preguntas a la mujer que la atendió, más para confirmar los pasos a seguir, que porque realmente tuviera duda; su interlocutora asintió en ambas ocasiones.
El rostro angelical y sonrisa tímida descubrían a una niña que a lo mucho alcanza los 20 años. Tan pronto se alejó del área de farmacia del Sanborns de Plaza Universidad, se entretuvo inspeccionando las muñecas y osos de peluche, abundantes por la época navideña. Vaya paradoja.
No pasaron ni 10 minutos cuando sonó su celular con el tono de una canción de Lady Gaga. En la llamada, confirmó que ya había adquirido lo que necesitaba y que tenía un ‘colchón’ superior a las 24 horas para tomar la pastilla.
Su nombre es Lorenza y vive en la Colonia Del Valle con su mamá, pero el fin de semana pasado estuvo sola, pues ésta tuvo que viajar por razones trabajo. Ella invitó la noche del viernes a su novio a la casa, y aunque no esperaba que nada pasara, según sus propias palabras, “se dejaron llevar por el momento”.
‘Lore’ es una niña bien; ‘balbucea’ en perfecto inglés ‘Rolling in the deep’, que suena en el lugar; y cada cinco o seis palabras le dice ‘wey’ a su amiga y confidente, a la que le confió su aventura reciente.
La discresión no es una de sus virtudes, pues habla por teléfono como si estuviera sola en la sala de su casa y se paseara entre los sillones y el ‘home teather’, riendo a carcajadas con frecuencia y llamando “pendeja” a su ‘cómplice’, quien le solicitaba pormenores de la noche de pasión.
Mientras más detalles descubría el arriba firmante de esta ‘historia de Sanborns’, más intrigado y viejo se sentía. No hubo más, la protagonista terminó su llamada y pareció olvidar el interés por las muñecas, por lo que caminó distraida, sin mirar a nadie, rumbo a la salida del establecimiento.
Guardó su Iphone 5 en el bolso y se dirigió a la orilla de la calle, donde con las intermitentes prendidas había dejado en plena avenida su vehículo, un minicooper rojo con blanco. Tardó más en encenderlo que en desaparecer de la imaginaria; sólo dejó su imagen juvenil y desenfadada en mi mente.
‘Lore’ me ‘contó’ parte de su vida en unos minutos, pues mientras yo intentaba comprar unas galletas para la merienda y unas cápsulas que combaten el insomnio, ella ‘resolvía’ el más reciente de sus placeres con la maravillosa ‘pastilla del día siguiente’.
DRMO
Noviembre 2011

Vuelve, Acapulco


Daniel Montes de Oca


 El sonido de las olas anuncia una y otra vez que Acapulco está herido, pero de pie.
Hoy la furia del mar apenas alcanza para borrar las huellas en la arena, porque la sangre baña de lamento a un paraíso que luce desierto.
Triste pero real: el puerto vive en manos de la violencia. No hay turismo, la gente ruega tranquilidad, pero en cada esquina se respira plomo…
‘La maña’ –término local con el que se le conoce a los grupos de mafia o de narcotraficantes–, tiene secuestrado a este lugar que hasta hace muy poco solía ser el perfecto anfitrión de vacacionistas de todo el mundo.
Hoy las historias relacionadas con festejos y aventuras no tienen eco en esta tierra; las playas padecen un gran vacío; las otrora ‘discos más exclusivas’ están cerradas o tienen a sus ‘todopoderosos’ cadeneros suplicando por clientes; e infinidad de hoteles y negocios han quebrado…
 

A las 21:00 horas es ‘el toque de queda’ no decretado, pues casi de forma sincronizada la gente se encierra en su casa y ni por error asoma un dedo.
El sol en su máxima expresión sigue iluminando los días en Acapulco, pero éstos son más oscuros que las noches. Ejecutados en pleno Zócalo, balaceras en centros comerciales o encadenados en los puentes, son parte de la cotidianidad de este pueblo, que pese a la desgracia y el terror que lo azota, no pierde ni un ápice de calidez.
“Cuando te toca, te toca”, afirma ‘La Morena’, una acapulqueña de 25 años que no se amedrenta por la situación que tiene de cabeza a su territorio.
“Mis amigos y yo hemos estado tomando en la playa de noche y a veces llegan los de ‘La maña’ en sus camionetas con sus mujeres, instalan sus mesas, ponen música, pero no nos dicen nada; cada quien está en lo suyo”, relata.
Así, entre retenes, militares, Policía Federal y anuncios de programas infructuosos como ‘Acapulco seguro’, el puerto vive quizá la peor crisis de su historia, pero cada ola anuncia que para vencerlo hace falta más que una ‘maldita maña’…
DRMO
12 de octubre de 2011
Dedicado a ‘La Morena’

El Santuario


Daniel Montes de Oca

 
“Todo nos ha salido como queríamos”, dice orgulloso el novio, buscando la mirada de su ahora esposa para encontrar la confirmación a sus palabras.
El suceso que congregó a más de 500 personas obedecía a la unión de dos almas que desde hace tres años están tomadas de la mano.
La sede de este ‘cuento de hadas’ fue La Piedad, Michoacán. La princesa de la historia llevó a casa el acontecimiento y mejor lugar no pudo elegir. Un evento que suele ser convencional e incluso rutinario, fue tocado por la magia de los protagonistas, fue tocado por el amor.
Ella estaba hecha una diosa. Un rostro que no fingía ni siquiera su belleza. A la cadena de bendiciones que ha copado su tránsito por esta vereda, se sumó una que la tenía volando: el matrimonio.
La ceremonia religiosa se alargó sin que nadie lo notara, pues el obispo no ofició el tradicional discurso de unión; compartió la dicha de la gloria de los contrayentes con cada uno de los ahí presentes; todos pudieron tocarla.
Para ese momento la ciudad ya estaba de cabeza: juegos pirotécnicos y una lluvia ligera sellaron el enlace.
En pocos minutos, el Santuario del Señor de La Piedad cerró sus puertas para atesorar lo vivido y dio paso a la fiesta.


Cruzare los montes,
los ríos, los valles por irte
a encontrar, salvaría tormentas,
ciclones, dragones sin exagerar,
por poder mirarme en tus ojos bonitos,
y vivir la gloria de estar a tu lado,
porque en mí ya siento que te necesito,
que me he enamorado”…
‘Eso y más’ le dio la bienvenida a unos novios llenos de plenitud.
Se sucedieron abrazos, baile, buenos deseos, historias, sonrisas, sueños, propósitos, ilusiones, reencuentros y un sinfín de emociones que sobrepasaron la capacidad del lugar.
Una boda es el retrato perfecto de la felicidad y más si en ésta todo sale ‘a pedir de boca’, como bien resumió el dichoso esposo.
DRMO
27 de septiembre de 2011

Fantasma encantador

Daniel Montes de Oca


La cadencia es su sello y el virtuosismo su escudo. Recorre el campo con el gozo con el que un niño vuela un papalote, y así, con la pelota como su cómplice más fiel, da pasos firmes hacia la inmortalidad. Su juego lo llevará a competir en una Liga suprema, aunque él sólo ambicione mantener la ilusión por seguir enalteciendo sus colores.
Piernas cortas, creatividad infinita. Le dicen ‘Fantasmita’, aunque de eso tiene poco, pues nunca desaparece. Alguien está en apuros hasta antes de encontrar su silueta, ya que basta con cederle un problema para que él lo convierta en oasis.
Su hábitat se ubica en el centro del terreno, pero él construye casas a su paso por cada rincón; nunca vive ajeno en su transitar por el escenario, se mueve con soltura en la azotea y el patio trasero, en el área chica y en una banda invadida por rivales.
El cenit ya tocó a su puerta y lo copó por completo; le cuesta liberarse, pero en cada batalla encuentra pretextos para desafiar al oponente, reinventarse y volver a hipnotizar con su futbol.
Él marca los compases de un equipo de leyenda y enciende las luces de las otras estrellas de la constelación. Es más que un motor, a veces está en las ruedas, girando el volante, pisando el acelerador y hasta poniendo un alto para iniciar de nuevo. Magnífico manchego de alma blaugrana.
Por suerte divina faltan muchos días y noches contigo en una cancha. Los resultados de tu bando hoy son insuperables, pero incluso cuando lleguen los adversos, tenerte en la palestra de lo inverosímil siempre será impagable.
DRMO
Abril 2011

La novia perfecta

Daniel Montes de Oca


El Barcelona es como la novia perfecta: encanta, enamora, pocas veces te hace sufrir, y le vaya bien o mal, se muere con la suya.
Nunca te engaña, busca los caminos, intenta, se abre y se deja conocer. Prioriza la felicidad sobre la ambición, es transparente, un ideal, tan perfecto que a veces no parece real.
Si estás de su lado te paga con virtuosismo, y si aún no le crees, te conquista sin misterios, sin velos; simplemente resulta imposible no caer en la telaraña del encanto.
Defiende su bandera respetando a cabalidad sus principios: aquí la necesad sólo cabe cuando el amor a los ideales va de por medio. Es ‘más que una novia’, es aliada, maestra, un racimo de sabiduría.
Congruencia se escribe con letras de oro en su manual de vida. Difícilmente se complica porque sabe aprender de un traspié y catapulta sus potestades en cada oportunidad.


En esta analogía entre un equipo de futbol y la novia perfecta, gana el primero, pues la segunda no existe, sencillamente porque la perfección es un estado utópico al que solo los dioses acceden.
Entre el juego y la mujer no hay punto de comparación, ella siempre estará con los dos pies por delante de la meta final; ella es un planeta, los colores, el alarido, el éxtasis y una eterna esperanza.
En este juego de ideas y combinaciones, el balompié es un simple distractor que aligera el trtajín cotidiano, no más que eso; sin embargo,
una pareja representa el sentido de cada uno de nuestros pasos, por ello, aunque la novia imperfecta aún no aparece en la imaginaria, concebirla a través del cadencioso azul y grana hace que la espera sea extremadamente deliciosa.
DRMO
Marzo de 2011

Amiga lejana


Daniel Montes de Oca


“¿Es tu novio?”, le preguntó mientras me señalaba sin mirarme, concentrada en la preparación de un brebaje que incluía 1.2 litros de cerveza, más una serie de ‘aderezos’ que lo hacían picante e irresistible.
La interrogada se sonrojó ligeramente y con gesto adusto contestó que éramos esposos.
Atrás del ‘mostrador’, la mujer rolliza y amable apenas se inmutó con la respuesta y reafirmó que era buena idea que ‘mi mujer’ me dejara probar de su bebida para comprobar sus bondades.
Fue el matrimonio más breve de la historia, pues la sonrisa de ‘Horte’ la delató y tuvo que decir la verdad: “sólo somos dos amigos que se ven de forma esporádica, pero con la suficiente confianza para compartir un vaso y la saliva”…

 
El momento me tomó por sorpresa: en menos de dos minutos tuve que asimilar la boda y el divorcio, demasiado para una mente retraída que gusta de analizar las cosas y las respuestas. Seguro me había puesto de mil colores con la simple duda de aquella inquieta señorita, quien incluso algo notó en nuestras miradas al grado de que, tras conocer ‘la verdad’, se atrevió a afirmar que ‘Horte’ y yo somos amigos, sí, “pero con derechos”.
Estábamos cerca de El Rodeo, un pequeño pueblo en Morelos, y el negocio de cervezas preparadas de nuestra ‘incómoda’ interrogante nos pareció el pretexto perfecto para apagar la sed provocada por el asfixiante calor, y un sol pleno a las 20:00 horas.
Ya instalados en una mesa para cuatro se incorporó Erika, la tercera a bordo, quien se había quedado en el coche durante el ‘enlace y la separación’. Con una vista a la que sólo le faltaba el mar, y disfrutando de nuestras bebidas, platicamos de diversos temas sin reparar en el que seguía dándole vueltas a mi cabeza…
Pese a que resulta imposible que pase inadvertida la energía con la que vive y una belleza poco común, nunca había pensado en ella como alguien más que una ‘amiga lejana’; alguien con quien coincidía en lugares, ambos llevados por diferentes motivos; alguien que sueles ver de a poco y luego la reencuentras mucho tiempo después…
Antes de emprender el viaje a Morelos, llevados por la celebración de una persona entrañable, ‘Horte’ contó que llevaba casi dos años sin pareja; sin reparar, le platiqué que mi tiempo en la misma condición era ligeramente menor. Incluso, ella en un gesto sincero, se ‘comprometió’ a presentarme a una compañera de su trabajo… No lo ha hecho; nunca desee que lo hiciera.
Vinieron más historias en nuestro trajín de 48 horas, buenas y malas, pero ninguna como el ‘matrimonio’ y la súbita separación.
A un mes de esta experiencia, concluyo que otra vez te disfruté poco y de lejos, y esto seguirá así porque tú no viste el capítulo de nuestro ‘enlace’ como yo, ‘amiga lejana’.
DRMO
20 de junio de 2011

Night

Daniel Montes de Oca

 
“Es la primera vez que trabajo en esto”, afirma con voz de niña y mirada inocente, aunque en el escenario, al compás de ‘Rabiosa’, el éxito del momento de Shakira, sus movimientos destapan a una profesional de la noche…
‘Valerie’ es originaria de Coahuila y a sus 20 años sueña con ser “artista o algo así”. Mientras eso sucede, de lunes a sábado, bajo la mirada atenta de la luna, gasta sus veladas bailando en un lugar para caballeros.
Aquel martes el sueño la vencía, pues el recinto estaba vacío y aunque está obligada a figurar en la pista cada cierto tiempo, desistió en por lo menos dos turnos, acomodada en el rincón de un sillón rojo, en donde intentaba aminorar el frío abrazando sus rodillas.
El arribo de un grupo de amigos la despertó, pues como promoción en el consumo de una botella se ofertan cinco bailes con chica a elegir. Ella fue la primera seleccionada, y en los tres minutos que dura el ‘cuerpo a cuerpo’, conoció al que calificó como “una linda compañía”…
Para ‘convivir’ con una ‘señorita’ en el Table Dance es regla invitarle una copa; sin embargo, ella rechazó la presión del mesero, cuando éste se lo sugirió a su acompañante, argumentando que se la estaban pasando bien y que el establecimiento estaba por cerrar.
“Me piden mucho para hacer camerino, pero te juro que yo sólo bailo”, contó con tono de súplica. Y es que “hacer camerino” implica tener sexo con el cliente bajo la tarifa que ella establezca o la que esté dispuesto a pagar el interesado.
Asegura que ha rechazado dos ofertas apetitosas: 30 y 50 mil pesos. “Ambos (clientes) venían con sus choferes y hasta hablaron con el gerente para que me convenciera, pero yo no me vendo; aquí estoy de paso, este lugar no es para mí por mucho tiempo más”.
Mientras platica, ‘Valerie’ fija la mirada en su interlocutor y lo conquista en cada aseveración. “Nunca dejes de sonreír”, le dice y lo remata.
Luego tres minutos de baile y de casi una hora de charla, otro mesero pone fin al encuentro, avisándole al ‘caballero’ que sus amigos están por abandonar el lugar y ya lo esperan. Ella, quien se negó a decir su verdadero nombre y ofreció vagas pistas sobre su lugar de residencia, le pide al ‘príncipe’ de esa noche que la vuelva a buscar, y le promete que si cambia de trabajo, dejará dicho en dónde puede encontrarla…
El diminuto atuendo azul que ajustaba perfecto en la excesivamente esbelta y encantadora figura, se tatuó en la mente del esporádico visitante al ‘Table’, quien en el trayecto de regreso a su casa se descubrió sonriendo como si estuviera posando de forma constante para una fotografía.
Esa noche en el ‘Night’ ella conoció a un tipo que la ‘atrapó’ con su discurso sencillo y fáciles bromas, y él se enteró que puede sonreír más seguido, aunque sea incluso al recordar un banal romance de a mentiras…
DRMO
6 de septiembre de 2011

El primo de un amigo


Daniel Montes de Oca



Los hombres tenemos la mala costumbre de presumir nuestras relaciones de pareja (serias o pasajeras), como si se tratara de un ascenso en el trabajo, de marcar un gol en el partido del fin de semana, o de haber patentado el remedio contra la estupidez.
Una plática entre ‘caballeros’ puede resultar lo más parecido a una competencia, en la que el que más trofeos tiene o se inventa, es el más ‘respetado’. Todo depende de la convicción con la que uno relate los hechos, o de las habilidades personales para enredar a cuanta incauta se cruce en el camino.
Si la ‘colección’ es extensa, eres un dios y ‘modelo’ a seguir; sin embargo, si más bien tienes un perfil reservado o tu transitar por los caminos del amor se limita a pocas, pero imborrables experiencias, las burlas hacia tu soledad o escaso rodaje, se convierten en una constante… En uno u otro extremo, uno aprende a vivir con eso.

Como muestra, este botón…
“Es en serio, quiero invitarte a salir”, me dijo después de tres intentos en los que me resistí a creer que su petición era real. Su tono de voz a través del teléfono se tornó casi suplicante, y apenas reparé en aceptar con una sonrisa obligada.
Nos conocíamos porque fuimos compañeros de trabajo, pero nunca hubo asomo de coqueteos, y mucho menos de atracción; al menos eso pensé hasta hace unos días.
Me sentí un conquistador consolidado, aunque increíblemente no había movido un dedo para serlo. El escenario era ‘envidiable’: una frondosa mujer sin compromisos ni limitaciones se puso enfrente para llevarme de la mano a vivir las experiencias que todo ‘hombre’ sueña conseguir.
En este punto me resulta oportuno aclarar que, aunque la historia relatada está escrita en primera persona, ésta le ocurrió al ‘primo de un amigo’…
La cita se pactó y resumiré el asunto diciendo que el encuentro tuvo sonrisas, recuerdos, revelaciones, y a dos seres humanos con intereses –al menos los relacionados a una pareja–, totalmente disímiles.
No por ello la compañía dejó de tener su encanto…
Aprendí que cuando existe la apertura para conocer a alguien y uno está hábido de hallar pareja, el mayor error que se puede cometer es buscar a la madre de nuestros hijos en cada rostro femenino que nos genera cierta ilusión.
Entendí que el primer paso es abrirse; ya después pueden experimentarse todo tipo de historias, como la que le tocó al ‘primo de un amigo’…
DRMO
27 de julio de 2011

miércoles, 4 de enero de 2012

Principessa

Daniel Montes de Oca
 

“Al verte me di cuenta de cuánto te extrañaba”, me dijo siete horas después de nuestro reencuentro. Reapareció tras años de distancia, con la sonrisa iluminada, la frescura de la juventud y con esa infaltable magia que me convierte en su cómplice en cada acercamiento.
Encontrar su mirada de manera inesperada me remontó a aquellos efímeros pero imborrables momentos en los que compartir se hacía costumbre, e intercambiar se volvió felicidad.
Apenas nos habremos tratado cuatro meses antes de que nuestros caminos tomaran rumbos distintos, pero cada instante adquirió un rango especial. Aprendimos a conocernos, nos confesamos, ofrecimos y recibimos; esto se convirtió pronto en una mancuerna que caminaba a la par.
Mis 10 años de ventaja sobre ella, lejos de una barrera, eran suficientes para lograr adherirme a sus ideas y sueños, pues a la par e incluso encima de su excelsitud física e interna, siempre estuvo su sabiduría.
Entendía perfecto el concepto de honestidad y lo llevaba a la práctica de forma natural; enseñaba sin pretenderlo; maduraba a golpes de vida; compartía un abrazo sin que se le solicitara.
Todo esto y la comunión de nuestras ideas, sonrisas y un sinfín de locuras, nos llevaron a eso que llaman amistad. Ella se convirtió en mi ‘Principessa’. “Sólo tú me dices así”, me reafirmó en nuestro reencuentro.
Nos ‘alejamos’ con la promesa de no hacerlo, pero el trajín cotidiano de cada uno y nuevas caras en nuestros andares, apenas nos habían permitido intercambiar algún saludo en esporádicas ocasiones, de forma impersonal, a través de una computadora o un celular.
Habían pasado varios sobresaltos y amaneceres en paz antes de que la viera aparecer ante mí en el tiempo y espacio menos esperados, pero ahí estaba, con una nueva vida, pero una misma esencia…
“Al verte recordé cuánto te extrañaba”… Excelsa frase me regaló hace una semana… La distancia pega, pero no mata el amor, concluí.
Te quiero, ‘Principessa’; bienvenida siempre a mi vida.
DRMO
Abril de 2011

La mudanza

Daniel Montes de Oca



“No puedo mudarme del mundo”, me dijo resignada mientras su mirada se fijaba en el pasado, en los últimos cinco años de su vida.
El duelo apenas comienza, su cuerpo no soporta la pesadez del adiós, la infinita tristeza de un final.
La tradicional sonrisa que suele acompañarla la abandonó, se escondió asustada por una realidad en la que es tiempo de enfrentar a solas el porvenir, sin el inseparable compañero que hacía la vida un poco ligera.
El amor eterno es una utopía para ella, pero nunca tuvo tiempo de preparar la despedida, ésta le llegó de sobresalto, la golpeó y ahora la enfrenta con las fuerzas que le contagian sus viejos cómplices: la familia y sus amigos.
Es la historia moderna de las relaciones de pareja: todo parece perfecto, cada pieza embona en su espacio, hasta que aparece el tiempo y se lleva con su rutina al entusiasmo; la ilusión la convierte en hartazgo y los sueños se posponen para una mejor ocasión…
“Debo tocar fondo para poder levantarme”, confiesa con voz de esperanza. Es tiempo de escuchar hasta el cansancio ‘su’ canción, esa que la transporta a los tiempos de plenitud, en los que ‘en la calle codo a codo ellos eran mucho más que dos’…
Por ello suena Calamaro de fondo y a ella se le agolpan los recuerdos: “Para qué contar el tiempo que nos queda, para qué contar el tiempo que se ha ido, si vivir es un regalo y un presente, mitad despierto, mitad dormido, mitad abierto, mitad dormido…
Presenté mis credenciales a tu risa, y me clavaste una lanza en el costado”…
Hoy sé que te gustaría “mudarte del mundo”, pero, por favor, no lo hagas, no sucumbas, pronto llegará de nuevo la luz y volverás al estado de gracia que ha marcado tu andar por esta vereda.
Para ti I.P.R.
6 de junio de 2011

Niño artillero

Daniel Montes de Oca


Corrías hacia el encuentro puntual con el balón; el área era tu territorio, de primera intención o recepción y tiro, no había diferencia, la red igual se estremecía,
los corazones se agitaban.
Poseías la fantástica y envidiable cualidad de la soberbia para defender tus colores e incitar a los tuyos a entender cada batalla.
Empatabas la astucia con la puntería; fuiste un incondicional del gol.
El ímpetu te traicionó más de una vez, pero las imágenes de los tiempos de gloria están guardadas bajo llave en la memoria viva de millones de mortales que soñaron estar en
tus zapatos por lo menos un minuto.
Niño artillero, excelso goleador, amante eterno de un balón.
DRMO
Febrero de 1998

‘La dama del futbol’


Daniel Montes de Oca

Le apodan ‘La dama del futbol’ y lo reafirma a cabalidad con una personalidad que impone y remite al balompié. Viste una minifalda rosa, playera blanca y porta con garbo su principal herramienta de trabajo: el silbato.
Charlamos en Sao Paulo con la árbitro brasileña Ana Paula Oliveira, famosa por su trabajo en las canchas y porque en 2007 causó gran revuelo y polémica debido a que decidió posar desnuda para la revista Playboy.
Desde los 14 años ya dirigía partidos amateurs de niños, inspirada en su padre que fue silbante, y poco a poco forjó una carrera en el arbitraje hasta llegar a ser profesional.
Participó en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, es la única árbitro que ha estado en un duelo de Copa Libertadores, aunque la polémica la ha perseguido por sus decisiones arbitrales y fuera del terreno de juego; lleva dos años alejada del arbitraje porque aquellas fotografías le beneficiaron económicamente, pero no en su carrera deportiva.
“Fue una decisión personal porque mi familia no tenía dinero, soy la mayor de tres hermanos y no teníamos condiciones, mis padres estaban con problemas de salud y tomé la decisión de posar porque el dinero le podía dar una condición digna a mi familia, la compra de mi casa…
“Como profesional la revista no ayudó mucho. Hubo muchos prejuicios, no sé por qué; ahora, después de tres años está todo muy tranquilo, existe la posibilidad de regresar”, revela Ana Paula.
Su belleza no pasa inadvertida para los curiosos que se acercan, interrumpen la charla y le solicitan algún autógrafo o fotografía; sigue vigente y por ello a sus 33 años tiene claro que volverá al arbitraje en 2012.
“Hay muy buenas perspectivas, es muy importante el trabajo que debo realizar en la preparación física porque ahora las mujeres debemos hacer el mismo test físico que los hombres, por eso voy a trabajar para regresar este año o en 2012, año olímpico, de nuevas posibilidades.
“Mi notoriedad en Brasil y en el mundo llevó a muchas chicas a procurar esta nueva profesión, pienso que el saldo es muy positivo, muchas mujeres en Brasil son árbitras por causa mía”, se enorgullece.
Oliveira es de fácil sonrisa, cálida, por ello cuando se le hace referencia a su belleza, agradece con cierta timidez, y responde si en su carrera algún futbolista la invitó a salir.
“Solamente una vez, mas no te diré quién (risas). Fue en la competición de la división principal nacional. Pero no diré equipo ni jugador ni nada. No acepté porque soy muy profesional”, concluyó la también analista de arbitraje en la televisión brasileña. 
DRMO
Sao Paulo, Brasil, julio de 2011 

Una imagen recurrente

Daniel Montes de Oca



La imagen es recurrente: Daniel Montenegro se lleva las manos a la cabeza y mira hacia el cielo. El argentino es el fiel reflejo de la impotencia, pues aunque el América se mueve a su ritmo, su talento no alcanza y las Águilas apenas sellaron un empate (2-2) ante el Toluca, que jugó 56 minutos con un hombre menos.
Se vivió un primer tiempo emotivo en el Estadio Azteca, con unos Diablos sólidos que rápido se pusieron al frente en el marcador con un tanto de Héctor Mancilla; sin embargo, la escuadra local reaccionó de inmediato y Jean Beausejour hizo el empate; lo único del chileno en el juego, apenas su segundo gol en México.
En una velada calurosa, la afición azulcrema no se significó en la tribuna para reflejar que se trataba de un juego de Cuartos de Final; ambiente frío. Cánticos esporádicos y tímidos de las barras, mientras en la mejor jugada del encuentro, tras una serie de combinaciones que surgieron de los botines del Rolfi, Miguel Layún selló la vuelta al marcador y el Azteca despertó a medias.
Chucho Ramírez lo aclaró en la semana: su estilo no es defensivo. Y lo estaba ratificando, con un América propositivo que utilizaba lo ancho y largo del campo, daba uno o dos toques al balón y en ocasiones le llegaba la lucidez para pararse frente al portero Talavera, aunque no fue capaz de ampliar su ventaja.
Quien sí capitalizó una falla rival fue el visitante vestido de rojo. Tras una pifia del guardameta Navarrete, que dio rebote a un disparo de trámite, llegó la igualada de Dueñas. ‘Nava’, el ‘héroe’ del encuentro ante Santos, ahora fue cómplice en los dos tantos escarlata. Así de ingrata es la portería, da y quita.
Llegó la jugada que parecía le daría rumbo a la eliminatoria: tras un pelotazo largo, Reyna le ganó la carrera a Novaretti y éste lo derribó, con lo que el central argentino se fue expulsado: “hijo de puta, hijo de puta”, así lo despidió la grada.
América tenía 56 minutos por delante para tomar ventaja y pagar la visita a Toluca dentro de ocho días con tranquilidad, pero la inoperancia se apoderó del local.
Para el complemento, los Diablos perdieron el interés en atacar y aprovecharon cada situación para ‘hacer tiempo’. El premio se lo llevó el arquero Talavera, quien en cada saque de meta tardaba minutos para ejecutar, con la complacencia de Armando Archundia, el ‘tibio’ silbante del cotejo, quien no dudó en sacarle la amarilla al Rolfi, que protestó una jugada botando el balón, pero que tardó por lo menos 20 minutos en amonestar al mañoso cancerbero visitante.
América perdió las ideas, Rolfi no tiene cómplices y está claro que solo no puede. Reyna es lo más cercano a una alianza del argentino, pero el ‘18’ echa por la borda su talento tomando malas decisiones: dispara cuando debe servir y sirve cuando debe disparar.
Sandoval ‘vive’ por las bandas a expensas de que le compren una falta en el área; Rojas es un lateral muy limitado, apenas cumplidor; Beausejour anotó y se perdió en la lateral izquierda y en la contención.
Chucho le dio entrada a los jóvenes delanteros Daniel Márquez y Tony López, quienes buscarían un cabezazo, cuando en el primer tiempo la fórmula que le funcionó a las Águilas fue pisar el área con triangulaciones.
No hubo más, un par de tiros de Montenegro que pasaron cerca, pero que terminaron con la imagen recurrente del encuentro: el Rolfi con las manos en la cabeza mirando al cielo.
América necesita ganar en el Nemesio Díez o sumará su segunda campaña eliminado en Cuartos de Final.
DRMO
Mayo de 2010

Las canas del Vasco

Daniel Montes de Oca

 

La cabellera de Javier Aguirre no tiene espacio para una cana más, y en gran parte se lo debe a la zona defensiva del Atlético de Madrid. Con un paso arrollador de seis victorias al hilo y a punto de situarse como segundo lugar de la clasificación, hecho que no consigue desde el 2004, el conjunto colchonero vio el freno ante el Villarreal, que con una marcha similar fue capaz de remontar dos veces una desventaja, para en la agonía del juego sellar un 3-4 espectacular.
Feliz por el tropiezo del líder Real Madrid en Sevilla y con la ilusión de ver a su Atleti sumar otro triunfo, la afición colchonera colmó el viejo estadio Vicente Calderón, y los primeros minutos de la contienda reinó la felicidad, pues con un juego vistoso el conjunto local se puso rápido al frente en el marcador 2-0, con  golazo para el recuerdo de Simao Sabrosa.
El uruguayo Diego Forlán fue el gran ausente del encuentro ante sus ex compañeros, pues acusó molestias físicas, y aunque de entrada parecía que no pesaría su ausencia, en el trámite del juego el Vasco echó de menos a su centro delantero.
El constante malestar del Atleti llegó demorado pero punzante al inmueble para echar a perder la fiesta rojiblanca en una soleada tarde madrileña: el portero argentino Leo Franco, en complicidad con los defensas centrales Pablo y Perea, conjugan la fragilidad con la lentitud, y son capaces de estropear un triunfo histórico como el que estaba gestando el conjunto local.
En un abrir y cerrar de ojos el Villarreal fulminó la ventaja de dos goles de los colchoneros, que entre ellos se miraban incrédulos, mientras en la tribuna culpaban al juez de línea y al arbitro por no señalar posición adelantada en los tantos.
El complemento no fue menos tormentoso para el Vasco, quien no se sentó ni un minuto, pues apenas iniciado, le regalaron un penalti a su equipo, que Maxi Rodríguez desperdicio tirándolo por un costado.
Sin embargo, este Atleti ya tiene el sello del técnico mexicano y además del talento colectivo e individual, posee garra, y por ese medio llego el 3-2. El argentino Sergio Agüero, quien esta convertido en uno de los mejores jugadores de la Liga y entre los punteros de la tabla de goleo, remató un centro para que en una voz el Vicente Calderón se le entregara: “Kun, kun, kun”.
Pero los verdaderos protagonistas de la tarde, Leo Franco y Perea, faltaban por pasar lista de presentes. En un forcejeo, el delantero mexicano Guillermo Franco superó al defensa colombiano y ante la tibia salida del arquero argentino, empató los cartones.
Los abucheos para la dupla extranjera de la zona baja del Atleti eran recurrentes cada que tocaban en balón. El ataque rojiblanco tiene variantes e individualidades; sin embargo, la defensa es su punto flaco y ayer lo evidenció.
El cuadro local se fue con todo por el triunfo, impulsados por Javier Aguirre, quien no paró de aplaudir, pero en un descuido cuando ya se habían anunciado tres minutos de compensación, el Villarreal hizo efectivo un contragolpe y Franco nuevamente fue solo espectador en el gol a su escuadra.
Llegó el freno a la marcha imponente del Atlético de Madrid, que tuvo todo para acercarse a dos puntos del líder, pero se le fue de las manos de manera increíble un triunfo cantado, mientras Aguirre buscaba espacio entre su cabellera para dar crédito a lo que acababa de vivir.
DRMO
Madrid, noviembre de 2007

El secreto de la garra

Daniel Montes de Oca

    
 
“Ganamos el Mundial y me vuelvo a Uruguay”, dice con la misma convicción con la que Diego Lugano defiende su meta partido a partido, o Luis Suárez dispara a gol.
Se llama Micaela Chaves, es consultora de Recursos Humanos y radica en México desde hace tres años.
A sus 25 años, es la primera vez que atestigua la presencia de la selección celeste en Semifinales de una Copa del Mundo, y al igual que los dirigidos por el ‘Maestro’ Tabárez, va paso a paso; goza cada momento.
“Nosotros no disfrutamos después de ganar, disfrutamos cada momento; ver a Uruguay jugar y que los futbolistas están dando todo, ése es el triunfo de Uruguay”, revela ‘Mica’ con la ‘remera’ (playera) celeste bien puesta.
En la víspera del juego ante Holanda, Chaves relata el orgullo que siente por el papel de su selección en Sudáfrica, pero sobre todas las cosas pondera que la esencia de “su pequeño gran país” de cuatro millones de habitantes se mantiene intacto, pues no vive del pasado ni de esos dos títulos del Mundo que logró en 1930 y 1950.
“El inicio de nuestro deseo no es con base a lo que ya ganamos, es con base a las personas que hoy nos representan. Todos los futbolistas viven el paso a paso, el partido de nuestras vidas es hoy”, señala con convicción.
De visita en las instalaciones de RÉCORD, esta charrúa se desenvuelve con soltura al momento de posar para las fotografías y durante la entrevista.
Incluso relató una anécdota que vivió en un bar del Distrito Federal, adonde acudió a observar el Uruguay-Ghana de Cuartos de Final; confesó estar sentida con los comensales mexicanos de dicho lugar, pues “resulta que los tricolores eran todos africanos”.
“Cuando llegué me sentí tranquila porque había poca gente, pero poco a poco se fue llenando el lugar y me llené de nervios. Cayó el gol de Ghana y todo el mundo lo grito, parecía que jugaba México; eso me enojó, yo traía la playera amarrada a la cintura y en ese momento me la calcé”…
Chaves hace una pausa y recuerda que en la adversidad es cuando más sale a relucir el espíritu uruguayo. El drama de los tiempos extra con la mano de Suárez fue un capítulo aparte. “Cuando atajó la pelota, te juro que todos los uruguayos sabíamos que luego de eso íbamos a ganar.
“Se vino el penalti del ‘Loco’ (Abreu) y se los canté (a los aficionados mexicanos) con todo. Era la única uruguaya ahí, pero nunca me sentí sola, sentí que cuatro millones de uruguayos gritaban al mismo tiempo el gol en diferentes partes del mundo”. Revancha consumada. 
Sobre las críticas que ha recibido el delantero Luis Suárez por detener el esférico con la mano dentro del área, pues incluso ha sido calificado como ‘tramposo’, ‘Mica’ tuvo una respuesta.
“Mucha de la gente que se queja es porque sus arqueros ni siquiera pudieron atajar bien en la Copa. Dejar todo en la cancha, eso es la garra, y si para ello se necesitan dos arqueros como lo hizo Suárez, para mí está bien”.
A esta celeste nada le baja el ánimo, ni las ausencias que tendrá hoy Uruguay ante Holanda, ni que la escuadra europea esté marcada como favorita; el secreto de su pueblo, dice, “es tener muy poco y creer que con eso se puede hacer mucho”, por ello, aunque no pronosticó un marcador para hoy, espera: “otro juego que nos llene de orgullo. Pero vamos a ganar (risas).
‘Mica’ volverá a Uruguay en dos meses, luego de una experiencia de tres años en México, la cual le dejó muchas enseñanzas, pero la principal de ellas fue la de “amar aún más a mi país”.
DRMO
Julio de 2010

martes, 3 de enero de 2012

Siete años

Daniel Montes de Oca

Llegué envuelto en nervios, pero convencido de que el reto era para mí. Hoy, hace siete años, toqué la puerta de esta casa, ya no era un novato, pero sí estaba por jugar en la Liga más competitiva.
Desde la pequeña trinchera en la que crecí y me formé como profesional, siempre tuve la seguridad de que cuando llegara el momento tenía que dar el salto, pues los amores que se hacen costumbre se oxidan.
Me vestí ‘decentemente’ y mi cabello no era tan eterno como hoy, así que por la ‘pinta’ no había mucho problema, reunía los requisitos que este oficio demanda. Después, dar visos de capacidad era la prueba suprema, pero tampoco me costó superarla.
Al ruedo desde el primer día para comprobar con hechos lo que las palabras alardeaban. Todo resultó muy sencillo: las herramientas y el grupo humano crearon un ambiente propicio para mi arribo. Me adapté de inmediato y pude nadar sin flotadores desde el silbatazo de salida.
Era el inicio de una exquisita historia llena de realizaciones y tareas por cumplir; de plenitud e insatisfacción; de azucar y sal; de sonrisas y sollozos… Era mi debut en la ‘gran carpa’, que en un instante me cambió la rutina.
A partir de ese momento se estableció, la hasta ahora, relación profesional más larga de mi vida. 21 de abril de 2004, un día que merece recordatorio.
Manejo un bajo perfil, pero una alta dosis de lealtad, por ello, aunque muy lento, pero fui rompiendo las barreras para codearme con la ‘nueva familia’… Y lo que uno cree que es una simple relación laboral, con un poquito de tiempo y de forma intempestiva, toma tintes de historias melodramáticas, de amistad, de indiferencia y, por supuesto, de amor.
Son incontables las herencias que ya tengo de esta casa, pero sin duda tres me han marcado:
1. Aquí conocí a la mujer que más he amado hasta hoy, y aunque ya no la tengo a mi lado, siempre estará conmigo...
2. La invaluable amistad de mucha gente que sigue con esta camiseta, o que ya juega en otro equipo.
3. Y por último, el progreso personal y profesional que representó mi llegada a esta institución.
Y a siete años de mi arribo, aún no me libero de los nervios cuando se trata de plasmar la pasión por mi trabajo, y aunque éste no lleve una firma al inicio, siempre destila el olor de mi entrega.
DRMO
21 de abril de 2011

La pregunta de Emiliano


Daniel Montes de Oca



El viernes pasado, mi sobrino de 5 años me preguntó que por qué trabajo. Como suele suceder en estos casos, y no fui la excepción, las dudas de los niños nos meten en serios aprietos a los que por edad hemos adquirido el rango de ‘adultos’ y por ello creemos tener las respuestas para ‘todo’; claro, menos para definir en lo que está convertida nuestra vida.
Salí al paso del cuestionamiento con un trivial y no menos rutinario: “porque todos debemos hacerlo para que este país salga adelante”. La respuesta no le convenció a Emiliano, quien me observó con gesto de aburrimiento y optó por cambiar de actividad, corriendo a los brazos de su abuela, a la que le propuso jugar con sus sofisticados juguetes de Ben 10.
Ajeno a las famosas y demandadas redes sociales, pero no a la reflexión, me quedé inmerso en la pregunta y aún estoy en proceso de responderla.
De entrada, ubiqué mi realidad. Estoy en RÉCORD desde hace más de seis años, porque hago lo que me gusta, lo que mejor me sale y a lo que quise dedicarme tras sumarme a los millones de frustrados que se quedaron en el intento (o que ni siquiera lo intentaron) de ser futbolistas profesionales.
También, obvio, por una necesidad económica, de subsistencia y de practicar mi profesión. Bueno, esas razones atienden a la lógica, no tanto así al corazón.
Otro argumento por el que trabajo en este lugar es porque algunas de las personas que están aquí ya son parte de mi vida, y aunque algún día pasará, por ahora me resisto a separarme de ellas. Va otra frase trillada: Son como una segunda familia. Es real.
Y ya entrando más a una respuesta convincente, estoy aquí porque esto me apasiona, así de simple. No comparto algunas políticas, ciertas normas de la empresa y muchas otras cosas, pero sí comparto estar y sentirme que me desenvuelvo en un diario de Liga Premier, no de Concachampions, pese a vivir en este amado país que día con día tiene más problemas e historias negativas que positivas.
Hace una semana, el mejor reportero de este diario dio un discurso de despedida antes de volar a Europa para seguir a la Selección Mexicana y posteriormente cubrir la Copa del Mundo. “Será mi segundo Mundial en RÉCORD”, dijo René Tovar.
Para mí también es el segundo aquí y me declaro listo. Hoy, tras la pregunta de mi sobrino, descubrí que también trabajo para nutrir mi ego y sentirme útil o, no sólo eso; sin pecar de falsas modestias, también para sentirme y tener la plena conciencia de que soy el mejor en lo que hago.
Trabajo para tener un poquito de esa demandada y efímera felicidad que buscamos todos los terrestres; trabajo para salir de la concha en la que me guardo cuando estoy fuera de aquí; trabajo para compartir gritos y sonrisas con algunos de ustedes.
Trabajo porque así la vida es más llevadera y cuesta menos transitarla.
DRMO
Mayo de 2010